Con la ayuda de sus amigos más cercanos, Reece viaja a México para localizar al sicario que mató a su familia. Katie continúa investigando desde un lugar remoto. Steve Horn toma medidas para preservar los contratos con Capstone y un grupo especial de Localización de Fugitivos del FBI de San Diego, dirigido por Tony Layun, se encarga de perseguir al SEAL renegado James Reece.